Love & war

Aunque los muros del tiempo se ciernan sobre nosotros, tus besos sobre mi espalda siempre serán mi libertad. Y tú, la paz frente a mi guerra más profunda; la marea que se lleve mis preocupaciones más absurdas. Mis ganas de luchar, de ganar la batalla que muchos dijeron que no podríamos ganar. Hacer de las sonrisas nuestra arma y de caricias nuestro escudo. De recuerdos nuestra vía de escape y de la idea de un futuro juntos nuestro nuevo mundo. Combatir con besos los ataques del destino. Y que cuando ellos digan que "Nada es para siempre", les podamos responder con un "Espera y verás". 

Porque en el amor y en la guerra: todo vale.

You

Hoy me apetece tu sonrisa, tus gestos y tu mirada. Hoy me apetece perderme bien acompañada. Buscar entre todos nuestros recuerdos, elegir uno de ellos y revivirlo parte por parte, como la primera vez que lo vivimos. Hoy me apetece cada uno de tus tequiero. Quedarme dormida y recorrer tus sueños con la yema de los dedos. Buscarte en todas partes y no dejar de cometer locuras hasta encontrarte. Hoy me apetece escuchar tu voz todo el tiempo, pero también tus silencios. Hoy me apetece que el viento me despeine y tú te rías de mi. Desafiar al tiempo disfrutando cada momento junto a ti. Hoy me apetece vivir, a ser posible viéndote sonreir. Y que "Tú" y "Yo"seamos las únicas piezas que encajen en este puzzle.

Hoy me apeteces Tú.

"Porque somos diferentes, encajamos como nadie"

You can.

Puedes llamarme loca o decir que no te importa. Puedo darte razones pero siempre me quedaría corta. Puedes esperar a que las cosas pasen o tomar la iniciativa. Salir a la calle con ganas de comerte el mundo o dejar que sea el mundo el que decida. Puedes buscar razones hasta debajo de las piedras pero ni siquiera ahí las encontrarías. Puedes contar tu historia pero lo que importa es que la vivas. Puedes soñar con ello o luchar por conseguirlo; decir que tienes miedo o perderlo en el camino. Puedes susurrar al viento, pero sería más productivo que gritaras lo que sientes por dentro. 

Puedes decir "no puedo" pero siempre habrá alguien que te recuerde que si quieres, puedes.